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8 colas de langostino sin pelar (de tamaño mediano, frescas o congeladas)
2 cucharaditas de Wasabi en polvo
2 cucharadas de vinagre de arroz
2 cucharadas de vino de arroz (Mirin)
1/2 ración de arroz sushi
salsa de soja japonesa
jengibre confitado
Debería probar la salsa de berros, aunque no es una salsa típicamente japonesa: Triture 40 g de berros y mézclelos con
1 /2 cucharadita de pasta de Wasabi, 50 m1 de caldo vegetal, 1 cucharadita de azúcar y 1 cucharada de vinagre de arroz.
Lave las colas de langostino, ya sean frescas o congeladas. Caliente agua en un recipiente. Eche las colas de langostino
cuando el agua hierva y déjelas cocer durante 4-5 minutos a fuego bajo. Escúrralas y páselas por agua fría.
Mezcle el Wasabi en polvo con 3 cucharaditas de agua y déjelo espesar.
Pele los langostinos hasta la cola. Quíteles el hilito de la espalda, que es el intestino. Hágales un corte longitudinal
por la parte de la barriga, de forma que sigan unidos por la cola.
Mezcle el vinagre de arroz y el vino de arroz. Macere los langostinos en la mezcla durante 2 minutos.
Escurra los langostinos. Curve las dos mitades del langostino formando un anillo. Embadurne ligeramente la parte interior
con pasta de Wasabi.
Con las manos húmedas, coja una cucharada de arroz sushi y forme una pelota un poco alargada de igual tamaño que el anillo
de langostino. Envuelva las bolas de arroz con el langostino, presionando para que éste quede adaptado completamente.
Disponga los langostinos decorativamente en una fuente. Sírvalos acompañados de salsa de soja, pasta de Wasabi y jengibre
confitado.
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